El pirómetro óptico es un tipo de termómetro que mide la radiación térmica sin ningún contacto físico con el objeto, detectando así la temperatura a la que apunta.

Operando entre 700°C y 4000°C, este instrumento puede medir temperaturas superiores a la incandescencia, metales fundidos, cerámicas y otros procesos industriales, estrellas y también temperatura en cámaras de vacío. Los pirómetros son ahora métodos eficaces (con errores cercanos al 2% y que disminuyen a medida que aumenta la temperatura) incluso para mediciones de temperatura negativas.

En general, los pirómetros son equipos ventajosos y tienen un tiempo de respuesta extremadamente rápido en comparación con los termómetros habituales de microsegundos.